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Como un globo verde y errático que pierde aire sin deshincharse Chlamydomonas se mueve en el agua, sin rumbo, girando por momentos, ahora sobre sí misma, para lanzarse después, veloz, en recto recorrido y dibujar más adelante rizos y trazos imposibles, sin fatiga, ágil y viva como una golondrina que recorta en piruetas su cielo de agua en primavera.

Y no son alas ni aire lo que hace volar en el agua a Chlamydomonas, son sus dos cortos e iguales flagelos la que la llevan de acá para allá, siempre buscando la luz.


Chlamydomonas es un alga unicelular, siempre verde y de contornos redondeados, emparentada con las que forman las asombrosas colonias de Volvox o Gonium. Está representada por cerca de 600 especies repartidas por todo el Planeta.

Chlamydomonas puede vivir en el suelo, el agua dulce, océanos, e incluso sobre la nieve en las zonas montañosas. Tiene una pared celular gruesa como una coraza protectora, un cloroplasto para realizar la fotosíntesis, un "ojo" con el que perciben la luz para dirigirse hacia ella y dos vacuolas pulsátiles que le ayudan a expulsar el exceso de agua que entra en su interior.

Es, además, sin duda, uno de los organismos más empleados en investigación biológica. Una cobaya dentro de los organismos microscópicos que ha empleado como modelo de investigación para conocer aspectos básicos de la vida: el estudio del movimiento de los flagelos, para conocer cómo se forman y evolucionan los cloroplastos, para ver como responden frente a estímulos luminosos, para secuenciar su material genético.

Chlamydomonas se nutre de la misma manera que las plantas verdes, pero sin raíces, tallo y hojas. Está rodeada de agua que contiene dióxido de carbono disuelto y sales para que con la luz y la ayuda de su cloroplasto, pueda fabricar almidón gracias a fotosíntesis. A partir de estos y con algunos otros elementos adicionales, Chlamydomonas puede fabricar todos los demás materiales necesarios para su existencia.

Hasta hace pocos años se pensaba que las algas de este grupo eran los antecesores de los vegetales actuales y por tanto uno de los grupos de algas más antiguos, sin embargo, recientes estudios de su ADN han aportado evidencias de su relativa juventud. A pesar de ello ha ayudado a descifrar muchos misterios de la vida vegetal...y eso que Chlamydomonas, al igual que Euglena comparte características que son propias de los animales.

La de hoy, probablemente Chlamydomonas pseudopertusa, se ha fotografiado a 400 aumentos con la técncia de contraste de interferencia y se ha encontrado en una muestra recogida a 3 metros de profundidad en el Lago de Sanabria (Zamora), desde el catamarán Helios Sanabria el primer catamarán construido en el Planeta propulsado por energía eólica y solar.

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