Gyrosigma es la diatomea del equilibrio, como el Ying y el Yang, de valvas débilmente sinuosas y delicadamente labradas en surcos invisibles sobre el cristal limpio de su cubierta.
De su ligera y perfecta asimetría surge su armonía. Mientras uno de sus extremos se asoma tímidamente a babor, el otro lo hace a estribor y de estos aparentes opuestos su navegar lento sigue un rumbo que traza rectas a sus destinos.

Gyrosigma attenuatum y Gyrosigma acuminatum son hermanas mayores de la que hoy se muestra aquí, de tronco más recto y tamaño diminuto, posiblemente Gyrosigma spencerii

Gyrosigma spencerii curva tímidamente sus extremos y muestra en su interior los pigmentos verdes que en primavera y verano fueron dorados, como en una mutación de las estaciones. Vive en aguas ligeramente cargadas de materia orgánica y procede de unas muestras recogidas hace unos días en el Pantano de la Grajera, junto a Logroño.

La fotografía de hoy ha sido tomada a 400 aumentos empleando la técnica de contrste de interferencia.