Moina


Moina
Moina
Lo que ayer eran fantasmas, al cabo de unas horas han cambiado su apariencia informe y perezosa y se han transformado en seres terrenales, mejor dicho: acuáticos. Son formas juveniles de Moina, la pulga de agua prima de Daphnia que a golpe de remo recorre el agua de algunas lagunas. Tiene un cierto aspecto de araña, pero no teje ninguna red y camina gracias a sus largas antenas, pues casi todas sus patas, protegidas en el interior del cuerpo, se encargan tan solo de sostener y agitar las branquias plumosas que absorben el oxígeno tan necesario para su vida.
Hoy los jóvenes de Moina han salido del nido, la fortaleza transparente que situada en la espalda de su madre los ha cobijado durante unos días. Han transformado su cuerpo blando e informe en otro de caparazón duro y contornos bien definidos. Los brazos caídos de su anterior etapa de fantasma son ahora los remos que erguidos impulsan a saltos a estos pequeños crustáceos ▷. Ha mutado su color pálido y fantasmal en el ocre de la tierra y los dos pequeños ojos verdosos se han fundido en un gran ojo de cíclope.
Al igual que todos los branquiópodos, Moina nada de espaldas y mira con su único y gran ojo hacia el sol ▷.
Moina ha conseguido ya su independencia, provienen de una madre partenogenética, mágicamente, sus huevos sin fecundar forman réplicas de su propia vida y estas formas juveniles, dentro de unas semanas, repetirán el mismo patrón de conducta y supervivencia que han heredado de su madre, de la que además de hijas, son hermanas y hermanas gemelas rejuvenecidas en una máquina del tiempo que ha retrocedido tan sólo unas semanas.
La fotografía procede de unas muestras de agua recolectadas en la Laguna de la Nava, junto a Lumbreras, en la Sierra Cebollera de La Rioja. La imagen ha sido tomada a 100 aumentos empleando la técnica de contraste de interferencia.
Hoy los jóvenes de Moina han salido del nido, la fortaleza transparente que situada en la espalda de su madre los ha cobijado durante unos días. Han transformado su cuerpo blando e informe en otro de caparazón duro y contornos bien definidos. Los brazos caídos de su anterior etapa de fantasma son ahora los remos que erguidos impulsan a saltos a estos pequeños crustáceos ▷. Ha mutado su color pálido y fantasmal en el ocre de la tierra y los dos pequeños ojos verdosos se han fundido en un gran ojo de cíclope.
Al igual que todos los branquiópodos, Moina nada de espaldas y mira con su único y gran ojo hacia el sol ▷.
Moina ha conseguido ya su independencia, provienen de una madre partenogenética, mágicamente, sus huevos sin fecundar forman réplicas de su propia vida y estas formas juveniles, dentro de unas semanas, repetirán el mismo patrón de conducta y supervivencia que han heredado de su madre, de la que además de hijas, son hermanas y hermanas gemelas rejuvenecidas en una máquina del tiempo que ha retrocedido tan sólo unas semanas.
La fotografía procede de unas muestras de agua recolectadas en la Laguna de la Nava, junto a Lumbreras, en la Sierra Cebollera de La Rioja. La imagen ha sido tomada a 100 aumentos empleando la técnica de contraste de interferencia.
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IDENTIFICACIÓN:
Moina
Fase juvenil
En una pequeña laguna
FOTOGRAFIA TOMADA EN:
España
La Rioja
TESTING o PUNTO BV:
Mis fotos ¡¡¡Por Félix!!! - 08/07/2010
EQUIPO Y TÉCNICA FOTOGRAFICA UTILIZADA:
Nikon D90 y microscopio Leica DMLB a 100 aumentos
Información EXIF:
NIKON CORPORATION
NIKON D90
1/160 sec(s)
F/0
200
0mm
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